7.6 La Tumba Francesa


La Tumba Francesa fue creada el 24 de febrero de 1862, bajo el seudónimo de de Lafayette, su nombre fue cambiado en 1905 en un homenaje ofrecido a la Virgen de la Caridad del Cobre.

La Tumba; que es el nombre de un tambor africano; es un tipo de baile, canto y percusión. Esta manifestación llegó a Cuba con los esclavos haitianos, después de los disturbios de 1790. Es el efecto de la fusión, en el siglo XVIII, del la música de Dahomey (Benin, Congo y Níger) y los típicos bailes franceses.

En Cuba las más antiguas evidencias se remontan a inicios del siglo XIX, en las ciudades de Santiago y Guantánamo, aunque la Tumba Francesa tuvo un gran auge de popularidad a finales del siglo XIX.

Sus ejecuciones músico danzarias comienzan con un solo efectuado por el cantante principal, llamado composeé y cuando este indica el catá, un gran xilófono de madera emprende un ritmo frenético junto a tres tambores, los cuales se tocan con la mano. Los cantantes acompañan el ritmo con sonajeros metálicos llamados chachás. Los tambores se fabrican a partir de un tronco de madera hueca, constituidos por una sola pieza y se adornan por motivos que son pintados y grabados.

La UNESCO reconoce como uno de los primordiales valores de la Tumba Francesa, la conservación de sus legítimas tradiciones populares durante casi siglo y medio, las cuales se preservan en todo su esplendor como un ejemplo innegable de la tradición y expresión de la cultura popular del oriente cubano. El 6 de noviembre de 2003, fue proclamada por la UNESCO, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad por Koichiro Mansura, su director general.

La sociedad santiaguera de la Tumba Francesa, La Caridad de Oriente, consta con dos siglos de existencia. Continúa interpretando los toques con sus instrumentos originarios entre los que se destacan los tambores de premier o mamamier, la tumbadora requinto y el catá o cataye que es el que guía el ritmo.

En la actualidad se tocan pocos de los cuantiosos estilos del baile de Tumba Francesa entre los que se encuentran el masón africano; que es una parodia jocosa de los bailes de salón franceses. También están la cinta, el gallo y el yubá; que es un baile improvisado basado en ritmos frenéticos del tambor, que es considerado el antecedente del Guaguancó y la Rumba.

En nuestros días esta sociedad apoya a los programas educacionales sobre Cultura Popular Tradicional Cubana que se llevan a cabo en la Universidad de Oriente (Ave. Patricio Lumumba s/n Altos de Quintero, Santiago de Cuba) y en el Instituto de Ciencias Médicas de la provincia de Santiago de Cuba (Calle E y Avenida de las Américas. Reparto Sueño Santiago de Cuba).

El pintor Jorge Arche Silva (1905 – 1956), sus aportes a las Artes Plásticas cubanas
La obra plástica de Enrique Caravia y Montenegro (1905 – 1992)
Wilfredo Oscar de la Concepción Lam y Castillo (1902 – 1982), la trascendencia de su obra plástica
El escultor Teodoro Ramos Blanco (1902 – 1972), su obra
La obra plástica de Gumersindo Barea y García (1901 – ?)
El pintor Carlos Enríquez Gómez (1900 – 1957), un exponente imprescindible de las artes plásticas cubanas
La obra del escultor Juan José Sicre y Vélez (1898 – ?)
La obra del pintor y arquitecto Augusto García Menocal y Córdova (1899 – ?)