2.1 Panorama Histórico del arribo de los africanos a Cuba, Siglo XVI.
Al arribo de los hispanos a la América, ya había en Europa esclavos negros, llevados allí por traficantes de diversas nacionalidades tales como españoles y portugueses.
En los inicios de la colonización en Cuba los aborígenes fueron obligados a trabajar como esclavos, en la búsqueda de oro y plata. Como consecuencia de los abusos y maltratos a los que fueron sometidos y de las epidemias como la viruela y el sarampión que padecieron, la población aborigen fue aniquilada en un período de tiempo relativamente corto. La extinción de los indígenas favoreció a que el tráfico esclavista adquiriera un mayor auge, teniendo lugar desde el comienzo de la conquista e imperando hasta el primer tercio del Siglo XVIII en Cuba. El ingreso masivo de africanos a nuestro país se inició a finales de Siglo XVI.
La mayoría de los negros africanos fueron traídos en calidad de esclavos mediante la trata negrera, siendo la razón fundamental el aspecto económico, ya que las industrias coloniales establecidas en el país requerían de gran cantidad de fuerzas de trabajo.
A los esclavos se les agrupó en los llamados cabildos, mediante estos se impedían las relaciones entre los distintos grupos étnicos africanos, con el propósito de que cada nación conservara su cultura original y evitando de esta manera las posibles mezclas entre ellas.
Los grupos étnicos africanos que poblaron el archipiélago cubano, se encuentran conformados por cuatro culturas principales como la yoruba o lucumí, los grupos congos o bantúes, la cultura carabalí y la cultura arará. Las culturas que mayor influencia ejercieron para la formación la música cubana fueron la yoruba, la bantú y la abakuá.
Toda música tiene una trascendencia social, de la sociedad adquiere sus timbres, ritmos y melodías. El negro africano procedente de disímiles grupos culturales influyó y enriqueció en gran medida la música cubana debido a que dicha población constituyó durante siglos la capa básica de nuestra sociedad.