4.1.2.7.5 El poemario “Versiones”, publicado por Eliseo Diego (1920 – 1994) en 1970


“Versiones” es un ejemplo entre nosotros de maestría en el uso de la prosa poética y su pertinencia para plasmar tanto lo real que el poeta va captando en su fecundo vínculo con el mundo como su propia capacidad “ficcionalizadora”, que encuentra en este continente un adecuado espacio de expresión de la belleza a la vez que de creación de ella.

Las versiones, en su sentido más amplio, son las de la muerte, tema que había sido y sería recurrente en su poética. En este sentido más que la muerte como término le obsedia la fugacidad inherente a la materia y a las huellas humanas, la muerte como obliteración y sinsentido de cualquier acto, todo lo cual plasma con la acostumbrada riqueza de matices.

En estas piezas de delicada artesanía lo real y lo imaginal no dejan fisuras en su enérgico abrazo, que tiene su primer asidero en los personajes que pueblan su cotidianidad, hecha del polvo y la piedra de los lugares, de su íntima sustancia que aparece a veces como desgarrada o erosionada por efecto de la demasiada memoria.

En este poemario desempeña un mayor peso lo sensorial en la captación de su entorno, especie de delectación que a veces transpone a cinestesias, como evidencia de su inmersión no premeditada en la realidad que lo circuye, de múltiples aristas y de la cual quiere también reflejar. Le interesa particularmente la misteriosa condición del espejo como objeto de segunda instancia de la realidad.

En síntesis, este poemario presenta una cotidianeidad trascendida por la capacidad fabular del poeta, como testimonio y a la vez un paso más en el adensado del vínculo con la realidad, de la cual salta pero no al vacío sino a la eternidad del conocimiento en su constante renovarse. Sin deponer sus armas avanza entonces en la forma de cognición del mundo que es la poesía y al mismo tiempo relampagueante revelación de sus hallazgos.

El pintor Jorge Arche Silva (1905 – 1956), sus aportes a las Artes Plásticas cubanas
La obra plástica de Enrique Caravia y Montenegro (1905 – 1992)
Wilfredo Oscar de la Concepción Lam y Castillo (1902 – 1982), la trascendencia de su obra plástica
El escultor Teodoro Ramos Blanco (1902 – 1972), su obra
La obra plástica de Gumersindo Barea y García (1901 – ?)
El pintor Carlos Enríquez Gómez (1900 – 1957), un exponente imprescindible de las artes plásticas cubanas
La obra del escultor Juan José Sicre y Vélez (1898 – ?)
La obra del pintor y arquitecto Augusto García Menocal y Córdova (1899 – ?)