4.3.4 Encamisadas en el teatro cubano en el Siglo XVII


Las Encamisadas constituyen otro tipo de procesión, de las cuales lamentablemente hoy en día no disponemos de mucha información, que tenía lugar dentro del ámbito teatral cubano y de la vida social en Cuba en el Siglo XVII, en forma de festividad religiosa.

Las mismas eran procesiones nocturnas, que se efectuaban en la Isla a la efectista luz de hachones resinosos o de cera.

En el archipiélago cubano, las encamisadas tuvieron un concreto carácter religioso. Hecho que no impidió que se combinaran en la fiesta con la que se celebraba la supuesta aparición de San Miguel, con las invenciones. Estas últimas constituían improvisaciones sobre algún tema apropiado a la festividad correspondiente, y eran escenificadas esquemáticamente.

Se ha hallado referencia de que en el año 1648, fecha de la muerte del gobernador Bartolomé de Osuna, la procesión de los encamisados dio inicio en la ciudad la fiesta de la aparición de San Miguel.

Las Encamisadas fueron una de las festividades del Siglo XVII que representó al teatro cubano de esa centuria.

El pintor Jorge Arche Silva (1905 – 1956), sus aportes a las Artes Plásticas cubanas
La obra plástica de Enrique Caravia y Montenegro (1905 – 1992)
Wilfredo Oscar de la Concepción Lam y Castillo (1902 – 1982), la trascendencia de su obra plástica
El escultor Teodoro Ramos Blanco (1902 – 1972), su obra
La obra plástica de Gumersindo Barea y García (1901 – ?)
El pintor Carlos Enríquez Gómez (1900 – 1957), un exponente imprescindible de las artes plásticas cubanas
La obra del escultor Juan José Sicre y Vélez (1898 – ?)
La obra del pintor y arquitecto Augusto García Menocal y Córdova (1899 – ?)