3.7.2 El cultivo de la crítica literaria por Enrique Piñeyro (1839 – 1911)
La labor crítica de Enrique Piñeyro continúa en esta etapa con mayores luces; fue reconocido como dómine en el contexto literario de su época, tuvo un sustento teórico de naturaleza ecléctica, pues bebió tanto del clasicismo como de los postulados más caros al romanticismo, con una postura científica positivista; en este sentido, ya en 1864 escribe su artículo “La literatura como ciencia positiva” en la que hace suyas las ideas de Taine, las cuales mantendría en esencia pero sin dejar de interactuar con otras ópticas estéticas.
Aunque no contradice el fin social de la literatura que propugna Varona, en cierto sentido aboga por la interiorización de este por el individuo, de forma que su arte refleje sentimientos y pasiones muy propias, pero aún con esta tesis fundamental, rastreando su obra pueden encontrarse aseveraciones divergentes.
Inicia su labor de crítica y teoría literaria con el texto “Estudios y conferencias de historia y literatura”, publicado en 1880 en New York, que recogía trabajos elaborados para revistas cubanas y conferencias anteriores, sobre el cual Varona expresó: “El libro del señor Piñeyro es, sin disputa, la obra literaria más notable que ha salido hasta ahora de la pluma de ningún cubano”
En 1883 publicó “Poetas famosos del siglo XIX. Sus vidas y sus obras” en que se vuelca al largo trazado poético del continente europeo, en torno a las creaciones líricas de Byron, Goethe y Hugo; pero en el cual refleja otras figuras importantes; también publica en París en 1892 el texto “Manuel José Quintana (1772 – 1857). Ensayo crítico y biográfico”, donde coteja con rigor los datos biográficos y literarios, a pesar de que su biografiado no trascendió a la sensibilidad contemporánea.
Sus criterios en materia de literatura se sustentaron sobre todo en el clasicismo y el romanticismo, del primero mantendrá el tradicional culto a la métrica como condición sine qua non de la expresión poética. Buena parte de su producción en este sentido aparece recogida en la sección “Notas críticas”, de “Revista Cubana”, donde se manifiesta también una concepción editorial renovadora en cuanto a diseño e intuiciones sobre publicidad.