3.7.10 Apuntes críticos de Martín Morúa Delgado (1857 – 1910)


Martín Morúa Delgado fue en esencia un intelectual que se abocó a la defensa de los derechos de los obreros, contribuyendo a la formación ideológica de estos y a su organización en gremios. Asimismo, tomó partido por los negros y al respecto sostuvo una enconada polémica con Juan Gualberto Gómez, ambos de raza negra pero con concepciones diferentes con respecto a la igualdad racial.

En este sentido, Morúa abogaba por preservar la identidad cultural de raigambre africana, sin que ello implicara hermetizarla, y no permitir la imposición de las costumbres y usos propios de la raza blanca y/o de las altas esferas de la sociedad, estos de ascendencia española.

No tuvo una larga ni sistemática trayectoria dentro de la crítica literaria; pero aún así contribuyó a conformar el panorama ideático de esta en las postrimerías del siglo XIX. En este sentido sus criterios parten de la discutible función didáctica que le atribuye en alta instancia a la literatura; esta concepción fue compartida por otros críticos de la etapa y lastró un tanto la creación literaria insular.

En 1892 publicó un folleto con el título de “Las novelas del SR. Villaverde” en la que más que analizar la esencia del argumento y el propósito de la obra, se centra en algunos detalles fallidos e inexactitudes que cometió Villaverde en el cotejo de los datos, de escasa significación para un juicio estrictamente literario. Su crítica constituye un cuestionamiento a la pertinencia de la obra desde el punto de vista moral.

Sin embargo, reconoció en sentido general la valía de esta y otras obras de Villaverde, y por extensión de la narrativa cubana, que aún se estaba consolidando como género en Cuba, a diferencia de la poesía, la cual ostentaba ya figuras de renombre universal.

Además de sus notas críticas y sus gestiones políticas, sobre todo en el contexto obrero pero también para el empeño independentista, escribió algunos versos y uno de los primeros ensayistas sobre el tema de las razas, con el texto “Cuba y la raza de color”. Publicó escritos en “El Pueblo”, “El Separatista”, “La República”, “El Cubano Libre”, “Revista Popular”, “La Tribuna”, “Revista Cubana”, “Las Avispas”, “El Fígaro”, “La Habana Elegante”, y otros después de instaurada la República, en la cual ocupó algunos cargos públicos, entre estos el de senador.

El pintor Jorge Arche Silva (1905 – 1956), sus aportes a las Artes Plásticas cubanas
La obra plástica de Enrique Caravia y Montenegro (1905 – 1992)
Wilfredo Oscar de la Concepción Lam y Castillo (1902 – 1982), la trascendencia de su obra plástica
El escultor Teodoro Ramos Blanco (1902 – 1972), su obra
La obra plástica de Gumersindo Barea y García (1901 – ?)
El pintor Carlos Enríquez Gómez (1900 – 1957), un exponente imprescindible de las artes plásticas cubanas
La obra del escultor Juan José Sicre y Vélez (1898 – ?)
La obra del pintor y arquitecto Augusto García Menocal y Córdova (1899 – ?)