4.1.1.22.8 El poemario “Harapo al sol” (1971 – 1973) y “Vocablos”, 1977, de Samuel Feijóo


En el poemario “Harapo al sol” Samuel Feijóo continúa una expresión dolorida que constituye una de las más auténticas de la lírica nacional.

Retoma ciertos postulados de la “vieja vanguardia” en tanto léxico y estructura compositiva; sin embargo los poemas aparecen impregnados de ese aliento poético de gran dimensión que expresa el hallazgo del poeta de sí mismo a través del dolor, el de la pérdida familiar acrecentado por el sinnúmero de tristes acontecimientos que a diario tienen lugar.

El desamparo del poeta es un punto iterativo de su producción lírica, ello porque la muerte es vista con un sentido de sutil asedio que viene desde la propia naturaleza y la soledad constituye quizás su primer nuncio. El espanto vuélvese entonces una reacción cuasi física que nos llega en sus versos con desolados matices.

Por su parte “Vocablos”, de 1977, constituye también la expresión de ese desgarramiento interior que encuentra cabida en su lírica con absoluta autenticidad, poesía hecha de compostura a veces quebrada por la transida emoción; aunque desde el punto de vista de la forma no mengua la valía de estas páginas.

Lo intelectivo – conceptual gana también espacio en la poética feijóoseana; pero como parte de su actitud de aprehensión estética global que vuelve a la naturaleza como asiento de todo lirismo. Lo cósmico, desde una sensibilidad que es en su hueso trasunto de vivencias colectivas, confluye asimismo en la conformación de una atmósfera poética trascendente.

Los citados poemarios transfieren a páginas de estatura estética notable el dolor del poeta en oleadas de reminiscencias, ecos de una angustia que encuentra cierto consuelo en su fusión con la naturaleza, como dadora de toda especia de vida y simultáneamente acogedora de la última tragedia humana.

El pintor Jorge Arche Silva (1905 – 1956), sus aportes a las Artes Plásticas cubanas
La obra plástica de Enrique Caravia y Montenegro (1905 – 1992)
Wilfredo Oscar de la Concepción Lam y Castillo (1902 – 1982), la trascendencia de su obra plástica
El escultor Teodoro Ramos Blanco (1902 – 1972), su obra
La obra plástica de Gumersindo Barea y García (1901 – ?)
El pintor Carlos Enríquez Gómez (1900 – 1957), un exponente imprescindible de las artes plásticas cubanas
La obra del escultor Juan José Sicre y Vélez (1898 – ?)
La obra del pintor y arquitecto Augusto García Menocal y Córdova (1899 – ?)